Sólo quiero escribir.

Quiero escribir por escribir, por el simple placer de escribir, no importa si lo lees, no importa si te gusta, sólo sé que quiero escribir, derramar mis penas sobre cada tecla, desahogarme en la pantalla, sólo quiero vivir para mí unos minutos, saber que existo para mí, verme reflejada en cada morfema.

Hoy sé que no soy la misma de ayer, hoy sé que me recuperé. Ayer me dolió, ayer hasta rogué (no quieran saber qué), pero hoy es otro día, no me mires con lástima, no te me acerques por pena que mi proceso de "borrón y cuenta nueva" comenzó en cuanto tu motor arrancó para alejarte, no sólo de mí, de mi casa sino también de mi vida.

Tomaremos las cosas como en el pasado, un pasado hermoso para ti, igual de doloroso para mi.

Seamos amigos, aquí ya no queda nada, tú lo has dicho. Ayer te negaste, la culpable fui yo, no importa, porque ya nada importa ¿ves?

Perdonénme las incoherencias, pero no estoy con ánimo de escribir bellezas, sólo quiero expresarme en mí, quiero saberme bien.

Ayer fue la primera y última vez que pedí algo, me lo prometo. Me lo creo.

No volverá a suceder, para todo hay una primera vez, pero no habrá una segunda.

Ahora empiezo de cero, no empiezo de cero contigo, empiezo de cero conmigo, replantear mis prioridades, la principal no ha cambiado sigue siendo lo que más amo: Dios. Así que no te sientas el súper aquí, que tampoco lo eres.

Hoy es un día diferente, un día en el que me renuevo. Me cansé de llorar, no volverás a ver mis lágrimas, dale gracias a Dios de que tuviste la dicha de verlas porque antes de ti nadie las vio, pero también pídele perdón, porque mi llanto llegó a sus oídos, soy la niña de sus ojos.

Sé que la decisión fue mía al final, aparentemente; porque la realidad es otra, estabas esperando esto, sí que sí. Lo esperabas, lo tuviste anoche y también mi arrepentimiento pero hoy no me arrepiento, hoy sé que fue lo correcto.

Así es mejor para los dos, ya di mucho de mi. Eras lo que buscaba para mí, te quería de verdad. no para un rato, por eso fue que luché tanto, por eso fue que no quería que terminara, no es aferrarme a ti, es que buscaba en esto algo serio, algo que no terminara así.
Ya sufrí bastante, hasta medio emo me he vuelto.

Me llegaste a hacer sentir frágil, tan frágil como una hoja de papel, me hiciste sentir débil. Fui débil ante ti, sí que lo fui. Pero ya pasó.

Hoy soy fuerte y aunque te quiero igual, sólo te ve como un amigo, como lo que somos.

Que pena que hayamos terminado así, que pena.

Pero ves que no fue tan hondo el pozo, pues ya estoy saliendo de él.

Recuperaré todo el tiempo que perdí, la vida que me robaste.

Hoy sólo quiero decirte que deseo que Dios te llene de su gracia y te levante, que te tome de la mano y avances en tu camino con Él. Que alcances aquello que tu corazón anhela, que seas feliz.